El Ministerio de Justicia de Rusia declaró este viernes «agente extranjero» al periodista ruso Dmitri Murátov, premio Nobel de la Paz 2021, por elaborar y difundir información destinada a crear una «actitud negativa» hacia el país. El periódico independiente Nóvaya Gazeta Europe fue el que informó de la medida tomada por Rusia en su canal oficial de Telegram.
Indicó que, según las autoridades rusas, Murátov «participó en la elaboración y difusión de materiales por parte de agentes extranjeros y también utilizó plataformas extranjeras para difundir opiniones destinadas a formar una actitud negativa hacia la política interior y exterior» de Rusia.
Esta calificación, que recuerda el término «enemigos del pueblo» de la era soviética, obliga a que individuos u organizaciones revelen sus fuentes de financiamiento. También los obliga a marcar todas las publicaciones, incluidas las realizadas en redes sociales, con un identificativo específico.
A principios de marzo de 2022, Murátov pidió un alto el fuego «incondicional» en la guerra de Ucrania y anunció la entrega de la medalla del Nobel de la Paz a una fundación de ayuda a refugiados ucranianos.
El galardón fue vendido el lunes en Nueva York en una subasta que recaudó la cantidad récord de 103,5 millones de dólares, destinados a Unicef para ayudar a los niños ucranianos.
Murátov también denunció el «genocidio» de los medios independientes en Rusia, donde se han clausurado casi 300 cabeceras.
Nóvaya Gazeta fue bloqueado por las autoridades rusas en septiembre de 2022, después de que el periódico suspendiera su publicación en marzo de ese año. Luego, fue declarado «indeseable» Nóvaya Gazeta Europe en junio de este año.
Según una ley rusa aprobada a finales de 2019, a partir de ahora Murátov y los medios rusos que publiquen sus artículos en Rusia deberán catalogar todos sus materiales periodísticos como elaborados por un «agente extranjero».
Indignación en Suecia por invitación a Rusia y Bielorrusia a los Nobel
Varios legisladores suecos amenazaron el viernes con boicotear las ceremonias de entrega de los premios Nobel de este año cuando la fundación privada que administra los preciados galardones dio marcha atrás en su política y finalmente invitó a Rusia, Bielorrusia e Irán a la ceremonia, países que antes estaban vetados.
La Fundación Nobel informó que se enviaron invitaciones a todos los países con misiones diplomáticas en Suecia y Noruega porque con ello “promueve oportunidades para trasmitir los importantes mensajes del Premio Nobel a todos”. No estaba claro si las invitaciones a los eventos del 10 de diciembre ya habían sido emitidas.
En un mensaje en la red social Twitter, el ministro de Empleo sueco, Johan Pehrson, calificó la decisión de la fundación de “extremadamente insensata”.
El año pasado, los enviados diplomáticos de Rusia y Bielorrusia fueron vetados en las lujosas ceremonias de premiación y banquetes, que tienen lugar el 10 de diciembre, debido a la guerra en Ucrania. El embajador de Irán quedó excluido por “la grave situación” en la República Islámica.
El primer ministro Ulf Kristersson dijo a la agencia noticiosa TT que, si dependiera de él, no permitiría la asistencia de Rusia.
“Aislar a Rusia de todas las maneras posibles —militarmente, económicamente— es necesario”, sostuvo.
Con información de EFE y AP